Independencia o Dependencia
La independencia es la formación o la restauración de un país inmediatamente después de la separación de otro del que sólo formaba una parte. El concepto suele estar asociado a la libertad.
Podemos ver que en esta definición aparece la palabra "libertad" y alguien podra decir que es algo bueno y no lo niego pero dice la biblia que somos esclavos de Cristo por amor.
1Co 7:22: "Porque si alguien es esclavo y cree en el Señor Jesús, él le dará la libertad. Del mismo modo, el que era libre se convierte en esclavo del Señor."
Pero ¿por qué digo por amor? Porque ¿quién no ha de amar a Dios? si nos ha amado El primero; 1Jn 4:19: "Nosotros amamos, porque El nos amó primero."
Ahora bien también refleja la palabra separación y según a la luz de la palabra de Dios, el separarnos del Señor no nos trae nada bueno, al contrario, nos insta a permanecer en El.
“Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto; separados de mí no pueden ustedes hacer nada”. Juan 15:5
Dependencia es un término con diversos usos que puede utilizarse para mencionar a una relación de origen o conexión. “Cántico de ascenso gradual. Levantaré mis ojos a los montes; ¿de dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene del SEÑOR, que hizo los cielos y la tierra”. (Sal 121:1 y 2)
Ante todo esto, me surgen unas preguntas las cuales son:
¿Por qué seguir insistiendo en independizarnos de Dios? ¿Acaso creemos que la independencia de Dios nos traerá bendición? ¿Por qué no mejor dependemos totalmente de Dios?
Necesitamos ser dependientes de la gracia, del amor, de la misericordia; “Vivan en armonía los unos con los otros. No sean arrogantes, sino háganse solidarios con los humildes. No se crean los únicos que saben”. Romanos 12:16 y del poder divino “Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas”. Proverbios 3:5-6. Dejemos a un lado la independencia, dejemos a un lado la idea de que podemos salir adelante solos; Porque yo soy el Señor, tu Dios, que sostiene tu mano derecha; yo soy quien te dice: “No temas, yo te ayudaré.” Isaías 41:13, que no necesitamos la ayuda, el auxilio, el consuelo, la fortaleza o la bendición de Dios; “El Señor es mi pastor, nada me falta...”. Salmos 23:1-2
¿Quién nos dio vida?, ¿Quién nos dio Libertad?, ¿Quién nos regaló la vida eterna? La respuesta está allí en nuestro corazón: Ha sido sólo Dios; “Porque no fue su espada la que conquistó la tierra, ni fue su brazo el que les dio la victoria: fue tu brazo, tu mano derecha; fue la luz de tu rostro, porque tú los amabas”. Salmos 44:3 entonces… ¿Por qué no depender de Él? ¿Por qué no depender del que nos conoce a perfección? ¿Por qué no depender del que tiene cuidado de nosotros? “El corazón del hombre traza su rumbo, pero sus pasos los dirige el Señor”. Proverbios 16:9.
¡Necesitamos depender de El!
¿Por qué seguir insistiendo en independizarnos de Dios? ¿Acaso creemos que la independencia de Dios nos traerá bendición? ¿Por qué no mejor dependemos totalmente de Dios?
Necesitamos ser dependientes de la gracia, del amor, de la misericordia; “Vivan en armonía los unos con los otros. No sean arrogantes, sino háganse solidarios con los humildes. No se crean los únicos que saben”. Romanos 12:16 y del poder divino “Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él allanará tus sendas”. Proverbios 3:5-6. Dejemos a un lado la independencia, dejemos a un lado la idea de que podemos salir adelante solos; Porque yo soy el Señor, tu Dios, que sostiene tu mano derecha; yo soy quien te dice: “No temas, yo te ayudaré.” Isaías 41:13, que no necesitamos la ayuda, el auxilio, el consuelo, la fortaleza o la bendición de Dios; “El Señor es mi pastor, nada me falta...”. Salmos 23:1-2
¿Quién nos dio vida?, ¿Quién nos dio Libertad?, ¿Quién nos regaló la vida eterna? La respuesta está allí en nuestro corazón: Ha sido sólo Dios; “Porque no fue su espada la que conquistó la tierra, ni fue su brazo el que les dio la victoria: fue tu brazo, tu mano derecha; fue la luz de tu rostro, porque tú los amabas”. Salmos 44:3 entonces… ¿Por qué no depender de Él? ¿Por qué no depender del que nos conoce a perfección? ¿Por qué no depender del que tiene cuidado de nosotros? “El corazón del hombre traza su rumbo, pero sus pasos los dirige el Señor”. Proverbios 16:9.
¡Necesitamos depender de El!
Referencia: PALABRA QUE HACE VIDA.
POR: JOSUE DANIEL GUERRA
POR: JOSUE DANIEL GUERRA
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